martes, 29 de mayo de 2018

EL MISTER PEREGRINO PEREGRINO FERNÁNDEZ-SAMPAOLI Y EL ESTILO ARGENTINO. Publicado el martes 29 de Mayo en JORNADA DEL CHUBUT

La “nuestra” es una utopía que podríamos encontrar en los buenos viejos tiempos.  
Propongo ubicar el mojón en el Mundial 78.
Tiene que ver la nuestra, con técnica excelsa, inteligencia y un touch de “picardía” o “viveza criolla rioplatense”.
Los yoruguas le añaden “garra”, esto es, pegar.
Han pasado varias décadas desde el último momento en que en los campos de juego argentinos podíamos encontrar “la nuestra”.
Aún con variantes autóctonas, el seleccionado podía exhibir lo que algunos llaman hoy “estilo”.
Tenían las distintas selecciones argentinas una impronta que podría provenir de la escuela de River o de Boca, de la rosarina de Central o Ñuls o de la platense del Pincha Corazón.
Ya en el Mundial del 82, el asunto se terminó.
Argentina se convirtió en un exportador de futbolistas cada vez más jóvenes que hace, literalmente, imposible conseguir un “estilo”.
¿Por qué?
Sencillo: un estilo, una manera, un formato táctico, una decisión estratégica (siempre de la misma manera o en función del rival que tenés), se obtiene sí y solo sí, haciendo “la diaria”.
Yendo a entrenar todos los días del año y si es posible, durante 20 años.
Por esto España y Alemania tienen estilo.
La mayoría de los integrantes de esos seleccionados, no solo juega en la Liga de los respectivos países, sino que son titulares-compañeros, en el MISMO equipo.
Barcelona, Real Madrid y Bayern Munich.
¿Me siguen?.
El “tiki-tiki” del Barcelona no tiene que ver solo con las capacidades técnicas y/o la genialidad de cada uno de los que están en el plantel.
También –y fundamentalmente-, con la posibilidad de que Xavi, Iniesta y Lionel juegan todos los días al fútbol desde que son púberes.
Los directores técnicos de todos los demás equipos (dejando de lado, insisto, a España y Alemania), son “seleccionadores”, no entrenadores.
Un estilo no se logra con 20 entrenamientos antes de disputar una copa del mundo.
Hacen falta 20 años.
Suena a pose, a ser políticamente correcto, a ser “de gauche”, de la “divine gauche”, pedir estilo.
Creo que si el tipo les cae simpático (a los integrantes de la Logia del Buen Gusto Futbolístico que se eligen entre Ellos), entonces se lo reconoce alto, rubio y de ojos azules, según nuestro formato cultural en el cual “lo europeo” es cool, al tiempo que “lo argento” atrasa.
Sampaoli, para colmo, no solo no ha formado parte nunca de la “divine gauche”, sino que, encima no viene del palo.
Peor aún: huele a kirchnerismo, a rockero que le escapa a las duchas.
Hace lo posible el pobre Sampa: es el más cercano entre los humanos que conozco y se dedican al asunto, a aquel personaje entrañable de Osvaldo Soriano, el Mister Peregrino Fernández.
El Mister, igual que Sampa, no considera necesaria la marca.
No digo ni garra ni pegar. Digo marcar, quitar, recuperar.
Parten, tanto el Peregrino como Sampa, de que la “posesión” será nuestra…siempre.
Es decir, los otros, no juegan.
Este “modelo” podría ser (no es seguro) aplicable al partido con Islandia.
Con Alemania o España, nos “comemos” entre 6 y 7 goles.
En éste sentido, come tanto o más vidrio que Bielsa. No obstante, a diferencia del Gran Obtuso Rosarino de Indestructible Márketing, tiene una barrera: sus propios futbolistas.
Contra Argentina, dirigiendo a Chile, sus futbolistas jugaron como debían: apretando los dientes, aguantando, rodeando (a veces con malas artes) a Lio Messi y dependiendo de la mala puntería de Higuain entre otros.
Le dieron cero bola a Sampa-Peregrino Fernández.
Cabe esperar que en Rusia suceda algo parecido con Messi, la Mesa Chica Ampliada y lo ya publicado aquí en anteriores columnatas.
La cruel cara del destino (con Romero) le acaba de evitar el primer disgusto con esa mesa chica.
Cae de maduro que debe jugar Armani.
Si el Mister Peregrino Sampa pone a Caballero para empezar el “tiki-tiki” desde la portería (dirían los gaitas), mi optimismo más allá de todo, puede empezar a titubear.
Que Messi lidere, en serio, el camino a la Copa.

martes, 22 de mayo de 2018

DECIDEN LIO MESSI Y THE BOSS MASCHERANO, EJECUTA GEORGE "OKTUBRE" SAMPAOLI. (PUBLICADO EL MARTES 2 DE MAYO EN EL DIARIO JORNADA DEL CHUBUT, PATAGONIA ARGENTINA).

Lionel Messi con la voz de su súper-yo, que resulta no ser otro que Mascherano, ha tomado el mando.
Algo que desde todas los sectores le vienen reclamando desde hace unos ocho años mínimo, esto es, que asuma el liderazgo, que sea líder, pues acaba de ocurrir.
¿Hay que escandalizarse o alegrarse al respecto?.
En realidad ocurrió (esto de asumir el mando en el seleccionado), en ocasión de la visita de Jorge Sampaoli a Barcelona hace unos días.
Allí se confeccionó la lista.
En ese encuentro, Messi, eligió a lo que hemos llamado aquí “la mesa chica”.
Ampliada en este caso.
La Mesa Chica Ampliada está constituida por: Messi, Mascherano, Higuaín, Agüero, Biglia, Romero, Di María, Otamendi, Rojo y Gabriel Mercado.
Todos ellos, de llegar al 100% de sus posibilidades físicas, hasta pueden ser titulares, no solo formar parte de “mesa chica ampliada”.
Titulares. Saltar a la cancha entre los 11.
El márgen de negociación de Sampaoli se reduce, en cuanto a la elección de los titulares (insisto: si todos llegan al 100% de sus posibilidades físicas), a la elección del arquero.
Cuestión, por cierto, no menor: hablo de Franco Armani.
Sampaoli deberá darse por satisfecho si consigue imponer a Armani por sobre uno de los integrantes de la mesa chica.
Hasta no ver a Romero en el banco, no daré crédito al asunto. 
No hace falta decirles que el autor de éstas líneas está convencido de que ese puesto es para el muchacho que ataja en River. 
Una “fiera” de la estirpe del Pato Fillol.
Lo demás estará relacionado con el devenir de los partidos y cómo se vayan acomodando los melones: Tagliafico de 3, o Lo Celso/Lanzini en lugar de Biglia o Banega de entrada. 
O la aparición de Meza.
Sampaoli es el entrenador con menos poder de decisión en los papeles desde que me toca comentar partidos por Copa del Mundo.
Presenté y comenté mi primer mundial en 1982 para Canal 10 de Córdoba, cuando se suponìa que asistirìamos a un mero trámite conducido por el Flaco Menotti ya que al equipo campeón del 78 se sumaba ni más ni menos que Maradona.
Dimos la vuelta sí, pero no llegamos a la final ni mucho menos sino que  marchamos con Diego expulsado.
Un papelón fue aquello.
Habría otro mucho más fulgurante en el lejano Oriente muchísimos años después.
Pero quiero volver sobre la idea-fuerza de la relación Entrenador/Poder de decisión/Grupo que se supone acata.
Repasemos: Menotti era “Dios” después del 78. Antes  lo había sido por decreto de la Junta Militar que gobernó la Argentina durante la larga noche de la Dictadura genocida.
Ni criticar se podía a César Luis, el Oràculo.
Se “humanizó” cuando marchamos humillados de España 82.
Luego vino su antítesis ideológica: Carlos Salvador “Bidonazo” Bilardo.
Tenía poder, obviamente, pero el mando se obligaba a descansar en Maradona no sin opositores que fueron puestos fuera de juego convenientemente. 
Recordar episodio Passarella y su retiro del mundial por vía del inodoro.
Basile, Le Cocò, era la verdad revelada misma, hasta que se comió 5 con Colombia en el Monumental. 
Allí apareció Maradona al doble comando hasta que le “cortaron las piernas”.
Luego se sucedieron las “dictaduras” de Passarella y Bielsa en donde no había nadie (ni siquiera el mismísimo Julio Humberto I de Viamonte), que pudiera tan solo hacerles sugerencias. 
Me consta que Julio hubiera llevado a Caniggia a Francia y a Román a Japón. Ambos –cani y Juan Román- quedaron afuera de aquellas convocatorias.
Luego vino Pékerman, con tanto poder de decisión que optó por Cruz en lugar de Messi contra los alemanes.
Maradona “ungió” al “mudo” Messi como capitán y finalmente Sabella, quién con su estilo exquisito fue capaz de formarle a Lionel un 4-4-2 que el futbolista no pudo-supo aprovechar en la final, otra vez, con los alemanes.
Todos tuvieron capacidad de decisión.
Sampaoli carece ABSOLUTAMENTE de ello. No manda. Apenas COMPLEMENTA. Y ha sido una apuesta (nunca mejor dicho), del “Chiqui” Tapia.


Estamos en manos de Messi y su grupete. 
Es por ésta razón que quien firma, vuelve a compartir con ustedes su pronóstico: Argentina vuelve de Rusia con su tercera Copa. 
Que así sea.